Todos limpiamos el armario, pero ¿sabemos cómo limpiar un armario de manera más eficiente? Lo primero que tenemos que hacer para limpiar un armario es vaciarlo. Una vez que esta toda la superficie despejada es el momento de limpiar el polvo. Si el armario hace mucho tiempo que no se usa podemos utilizar un aspirador, pero en principio nos basta con una gamuza. Después pasaremos un trapo humedecido con jabón de pH neutro, a base de vinagre o almendra, que cuide la madera y la nutra. Por último, tenemos que asegurarnos de secar bien todo el armario para evitar humedades.
Ahora, es el momento de volver a llenar el armario. Es aconsejable seleccionar el contenido del armario al menos una vez al año. Solo requiere unos pocos minutos y tendrás un armario perfectamente ordenado en el que encontrarás lo que necesitas en un abrir y cerrar de ojos.
Es sencillo si lo realizas siguiendo estos cuatro pasos:
- Organiza en pilas el contenido del armario. Una pila está destinada a las organizaciones benéficas, otra para lavar y la tercera para volver a guardar.
- Selecciona la pila de ropa que has decidido guardar. Pon la ropa fuera de temporada en cajas de almacenamiento bajo la cama o en bolsas a prueba de humedad y de polvo.
- Cuelga la ropa en perchas. Si usas perchas de alambra la ropa se deformará. Opta por las de madera, las de plástico o las acolchadas y utiliza perchas específicas para pantalones y faldas.
- Al sustituir las prendas del armario, pon juntas las del mismo tipo y las encontrarás más rápido. Agrupa chaquetas, pantalones, trajes, faldas, vestidos, blusas y camisas.