Ante la práctica derogación en el cumplimiento de la Ley de Dependencia 39/2006 de 14 de diciembre y la falta de recursos financieros, puesta en marcha de forma gradual a partir del 1 de enero de 2007, actualmente la atención a la dependencia y a las personas mayores se está configurando como una de las necesidades sociales emergentes más necesarias del tiempo histórico que nos está tocando vivir.
Por un lado la combinación de factores demográficos y sociales se sigue produciendo un notable aumento en el número de dependientes, entendiendo como tal, aquellas personas que presentan una pérdida más o menos importante de su autonomía funcional y necesitan de la ayuda de otras para poder desenvolverse en las actividades básicas de la vida diaria. Evidencia que coincide además con otras realidades como son el envejecimiento progresivo de la población, el cambio en el modelo familiar y la incorporación de la mujer al mercado laboral.
Los servicios necesarios en la atención de las personas mayores y/o las dependientes, en su propio domicilio, mientras ello sea posible y conveniente, ya que según los últimos estudios realizados son su preferente al no tener que abandonar su entorno y su hogar, y por tanto seguir en contacto con sus familias, vecinos, amigos, etc.
Cada día son mas las personas mayores que prefieren vivir en su propio domicilio
Son los individuos de mayor edad los que tienen mayores problemas de dependencia: una inmensa mayoría de sujetos dependientes moderados y severos tiene más de 80 años. Por todo ello, el problema de la dependencia de nuestros mayores se plantea como uno de los primeros retos al que han de enfrentarse las políticas públicas y privadas en nuestro país.
En este sentido, resulta especialmente urgente diseñar y poner en marcha programas y prestaciones en la atención a las personas con dependencia, a través de los sistemas públicos y privados de protección social.
Es decir, la dependencia de terceros motivada por la vejez o por discapacidad debe seguir generando derechos de atención que, a su vez, supongan el desarrollo de nuevos servicios. Y es aquí donde los poderes públicos en estrecha colaboración con el resto de los agentes sociales perteneciente a la red de servicios sociales; como ONGs, Asociaciones, Fundaciones, empresas privadas de prestación de servicios de ayuda a domicilio, etc., tienen que sentarse a colaborar en la provisión de los recursos financieros, técnicos y humanos precisos para la prestación de
Más del 80% de las personas mayores dependientes solo reciben ayuda del apoyo informal. La familia, por tanto, con la crisis actual constituye el principal agente proveedor de cuidados de larga duración, siendo especialmente importante el papel que en este sentido desempeñan las mujeres de mediana edad (hijas, nietas, nueras, sobrinas, etc.).
Sin embargo, esta situación puede verse sustancialmente alterada en un futuro inmediato, como consecuencia de los importantes acontecimientos que se vienen produciendo; el aumento del envejecimiento demográfico, el aumento de las cifras de desempleo, el regreso a su país de origen de la población inmigrante, y los cambios en las estructuras familiares (la creciente emigración de los españoles).
La razón que explica la urgente necesidad de provisión de nuevos servicios de atención a las dependencias es la inviabilidad del actual modelo de atención a nuestros mayores, como consecuencia del envejecimiento demográfico y la transformación de las estructuras familiares:
Envejecimiento de la población
Proyección de la Población de España a Corto Plazo 2013–2023
La tasa de dependencia (entendida como el cociente, en tanto por ciento, entre la población menor de 16 años o mayor de 64 y la población de 16 a 64 años) se elevaría en más de nueve puntos, desde el 51,0 actual hasta el 59,2% en 2023.
Avanzamos pues hacia una sociedad donde se acentúa la inversión de la pirámide de edad y donde el número de personas dependientes será cada vez mayor.
Actualmente se está por tanto produciendo un cambio inverso, siendo las personas mayores, las que están ayudando económicamente a los hijos, así como cuidando a sus nietos, y es probable que en los próximos años las nuevas familias empezarán a demandar la expansión de los servicios formales (atención domiciliaria, centros de día, viviendas tuteladas, viviendas compartidas, etc.) conscientes de que éstos son la única vía efectiva de lograr compaginar la actividad laboral y los cuidados requeridos por los mayores.
Nuevos recursos de Ayuda a la Persona
Servicio de Apoyo en el Domicilio
Ayuda en domicilio:
Se ofrece apoyo, mediante personal especializado, para realizar actividades personales como el aseo, la alimentación, movilizaciones dentro y fuera de la vivienda, supervisión de la medicación y colaboración en las tareas domésticas.
Ayudas técnicas y adaptación del domicilio:
Cuando uno de los problemas principales para realizar las actividades cotidianas es debido a un problema de movilidad, memoria, visión, etc. Se intenta facilitar ciertos recursos de uso personal, como bastones, andadores, camas articuladas o supresión de barreras arquitectónicas que dificulten los desplazamientos, como pueden ser las rampas, asideros, salva-escaleras, sustitución de la bañera por el plato de ducha, instalación suelo antideslizante, etc.
Alojamientos compartidos:
El programa de acercamiento intergeneracional consiste en compartir el tiempo y la vivienda de la persona mayor con un universitario, siempre respetando las premisas de establecer un buen diálogo y un mutuo respeto.
De esta forma, el mayor se sentirá más acompañado, se intercambiaran vivencias, realizaran actividades en común…
Apoyo y Asesoramiento a Familias
EL cuidado de las personas con demencia puede generar en las familias múltiples dudas sobre las atenciones que están necesitan y sobre el modo de compaginar la vida familiar, laboral y social con la asistencia al enfermo.
Soluciones Financieras para las Personas Mayores (ayuda a las personas mayores para obtener el mayor rendimiento a sus vivienda, a través del acuerdo suscrito con el GRUPO RETIRO.
Hipoteca Inversa, Renta Vitalicia Inmobiliaria, Seguro de Rentas Vitalicias, Venta con alquiler Garantizado (Leaseback).
Programa de Respiro Familiar
Con ello, se pretende dar una atención especializada durante el día a las personas con demencia que no pueden acceder a ningún servicio de estancias diurnas.
Este servicio se dedica a trabajar con el enfermo para ayudarle a mantener sus capacidades cognitivas, físicas y sociales el mayor tiempo posible.
Objetivos de servicios a personas mayores y dependientes:
Ante toda la problemática expuesta, el grado de atención actual a las dependencias desde la esfera pública y privadas en el caso de España se presentan, como así hemos visto, claramente insuficientes, muy especialmente en el caso de las administraciones públicas.
No hemos de olvidar, que la atención geriátrica es un derecho básico al que hoy en día, a pesar del artículo 50 de nuestra Constitución, no tienen acceso la mayoría de las personas mayores que la necesitan. Ante ello resulta imprescindible trabajar en el aumento y mejora de los recursos necesarios para atender dignamente en las necesidades de dependencia de nuestros mayores.
Enero 2014